Cuando llegaron se encontraron a Pelayo dormido, y decidieron ir a llevar a Pelayo al médico. Pelayo se despertó y el médico le mandó un jarabe que era apiretal, pero a Pelayo no le gustaba ese jarabe pero sus vecinos le dijeron que se lo tenía que tomar porque sino, no podría cantar, y así poco a poco se lo tomo. Y decía que no le gustaba porque estaba muy ácido.
FIN
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