Había una vez dos gemelas que se llamaban: Violeta y Lucia.
Como se portaban muy mal nunca les traían nada los Reyes Magos por ese
motivo no les gustaba la Navidad.
Un día su mamá harta de que se portasen tan mal hizo un trato con
ellas, las dos le prometieron a su mamá que siempre se iban a portar
bien.
Esa Navidad les dejaron en el árbol juguetes para las dos. A Violeta le
dejaron un baby born y un peluche y a Lucia le dejaron una cocinita y una
muñeca y desde ese día les gustó Navidad.
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